¿Qué tal estás?
Espero que sigas fenomenal y que la carta de hoy te encuentre con ganas de "escuchar" una historia sobre tulipanes, virus y economía.
Y es que la flor de nuestro taller online protagonizó un auténtico fenómeno (la tulipomanía) sobre el que se ha escrito bastante, más que nada para hablar de burbujas económicas.
La historia tal vez ya la conozcas, pero te la resumimos muy brevemente por si nunca la has oído: en el siglo XVII, las clases altas de Holanda convirtieron el tulipán, entonces exótica planta, en todo un símbolo de estatus, a la altura de un Rolex o un luisvui.
Básicamente, se volvieron locos por coleccionar y especular con sus bulbos, especialmente con las variantes más extravagantes que combinaban varios colores.
Los precios que se pagaban por los tulipanes eran realmente desorbitados, pero lo mejor todo es su espectacular giro argumental: aquellas flores que llegaron a costar lo mismo que una casa se encontraban infectadas por un terrible virus del que no se tuvo conocimiento hasta casi 300 años después y que era quien provocaba diferentes metamorfosis y cambios de color, tonos, patrones…
Curiosamente, no parecía afectar a los de color blanco o amarillo que eran los más comunes y, mientras tanto, los cultivadores hacían pruebas de todo tipo (que incluían desde excrementos de ave hasta yeso) para intentar descifrar el misterio que provocaba los peculiares patrones rayados o moteados de sus pétalos.
Por desgracia, esos fascinantes tulipanes acabaron tan debilitados por la desconocida enfermedad que muchos de ellos finalmente se extinguieron.
De hecho, de la variedad más cotizada, la Semper Augustus (de la que se decía que solo había 12 ejemplares en el mundo), solo queda testimonio gracias a algunas naturalezas muertas de la época que muestran en todo su esplendor el delicado dibujo de líneas rojas sobre fondo blanco de la flor.
La demanda de tulipanes raros no ha disminuido con el tiempo (aunque sí su precio, afortunadamente).
Casi todos los que ves en la actualidad están sanos y son producto de mutaciones e ingeniería genética, en un proceso que ha ido perfeccionándose hasta llegar a variedades tan exquisitas como la loro, que encabeza ahora mismo la lista de bulbo codiciados.
Su peculiar belleza se debe al borde rizado del pétalo, que puede llegar a recordar a la pluma de un ave (de ahí su nombre). Puede ser algo complicada de encontrar, pero esta vez no será necesario pedir un préstamo al banco para tener una: solo son ligeramente más caras que el tulipán normal.
Y seguro que podemos hablar mucho más de esta planta, de que sale también un gráfico de la misma en la película "Wall Street: Money never sleeps" -2010- (Wall street 2, continuación de la del 87), en la que el protagonista -Shia LeBouf- se encuentra en el apartamento de su futuro suegro -Michael Douglas- quien le explica que las relaciones personales son como las burbujas y le habla de la "Tulip Mania"...


Lámina de tulipanes en acuarela
Como verás, cada vez que planteamos un taller o nos preguntamos sobre la próxima planta a pintar para que decores tu casa, nos planteamos ¿qué vamos a aprender o practicar con esta planta? (en este caso los degradados), pero también buscamos información alrededor de la misma porque siempre hay historias detrás de cada planta, animal, objeto... Y a nosotros nos encantan las historias y saber el porqué de las cosas y ahora, cuando una historia nos gusta, también queremos pintarla.
Así que si te animas a pintar el tulipán, eres más que bienvenida a hacerlo online ya mismo.
Así que ya conoces algo más la historia de los tulipanes y también te dejo la puerta abierta a que adoptes la acuarela como tu hobby personal, ya sea conmigo, por tu cuenta o con quien quieras.
No solo porque es una forma creativa de aprovechar el tiempo, sino porque te acompañará toda la vida y te ayudará a mantener tus neuronas activas y tu mente positiva.
Te relajará en los momentos de estrés y te mantendrá activa, te ayudará a decorar tu casa, a hacer regalos, a disfrutar de tu propia compañía y a mantener un estado de ánimo óptimo.
Por todo ello estoy "emperrada" en ayudaros a sacar el tiempo básico para comenzar con un compañero de viaje maravilloso como la acuarela, y si prefieres otro “pasatiempo”, pues no lo dejes. Pruébalo, da ese pequeño paso que te traerá muchísimas recompensas: salir de casa un día cualquiera para reunirte con otra gente que tiene una afición como la tuya, sea la que sea, conversar con gente que no conoces en un entorno controlado… Nunca sabes si vas a conocer a un gran amigo en un taller, una charla, una expo…
Yo he hecho verdaderas amigas en el taller y aprendo un montón de los trabajos de los demás, de sus vidas, de sus viajes… Es como abrirte una ventana nueva a otro mundo. Una ventana por la que corre una brisa maravillosa.
Ánimo y si no lo has hecho aún: sal a buscar tu nuevo “pasatiempo”.